Ladrón, experto en cajas fuertes, fue condenado por robo millonario

Pedro Alfredo Román fue sentenciado a siete años de cárcel por sustraer joyas y gran cantidad de dinero al fallecido Norberto Lischinsky, exsecretario de Cultura de Corrientes, en el 2002. El malviviente cometió atracos por años hasta su arresto en el 2019.

 

Ayer el Tribunal Oral Penal Nº2 condenó a un hombre implicado en múltiples y complejos robos tanto en Corrientes como en otras provincias, Pedro Alfredo Román, quien fue sentenciado a siete años de prisión junto a su pareja, Karina Elizabeth Blanco, que recibió la pena de tres años de cárcel en suspenso.

El Tribunal emitió la reciente sentencia ante un caso de vieja data: el robo al exsecretario de Cultura, Norberto Lischinsky, ocurrido durante el 2002, en el que se llevaron grandes cantidades de dinero (pesos, dólares y hasta cuasimonedas que en esos tiempos tenían vigencia), joyas y objetos de valor. De todo, se recuperó muy poco, según aseguró el fiscal Nº2 Gustavo Schmidt ante el colega Raúl Sotelo (fotos gentileza).

La mujer en tanto fue sentenciada en calidad de coautora. Se indicó que algunos de los elementos robados habían sido encontrados en casa de la mujer.

El atraco fue bajo la modalidad de escalamiento, en el que Román ingresó tras forzar las rejas de una ventana que daba hacia la vía pública. Tras ganar el patio fue hasta el techo, levantó las chapas, rompió el cielo raso y entró a una oficina en la que estaba la caja fuerte que fue violentada.

Según el fiscal, en la caja de seguridad había 61 mil dólares, 478 mil pesos y más bonos como lecops, cecacor y demás, por lo que se calcula que actualmente lo sustraído alcanzaría un valor de diez millones de pesos, aproximadamente. También, había gran cantidad de joyas.
Román se llevó también distintos elementos electrónicos.

Al respecto debe señalarse que luego del hecho el malviviente estuvo detenido, pero luego fue liberado, lo que aprovechó para cometer múltiples robos similares en la provincia. Según se indicó tenía dos condenas.

Más allá de su amplio historial delictivo, el hombre tuvo tiempo de cometer sus fechorías hasta que en el 2019 fue arrestado, por lo que la causa por el robo a Lichisnky fue reactivada.

Al respecto fue poco lo que se pudo recuperar de aquel hecho. De los 61 mil dólares, se recuperaron mil y del casi medio millón de pesos, se encontraron tres mil.

También se recuperaron pocas joyas, aunque a la familia se ordenó la restitución de nueve relojes de distintas marcas, una cadena con crucifijo dorado, una pulsera dorada, una gargantilla con dije, dos anillos plateados y una máquina fotográfica.

Con respecto a la condena de Román, debe señalarse que los siete años se dispusieron porque se unificaron dos causas, una por el robo calificado mencionado y otra por un intento de asalto a mano armada.

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