La organización ambientalista internacional estuvo durante febrero por zonas devoradas por los incendios y puso en marcha una campaña en favor de los bomberos que luchan contra el fuego como así también de cuidado del medioambiente, en particular los esteros del Iberá.
Imágenes devastadoras de las consecuencias que sufren las zonas afectadas por las quemas en el interior correntino fueron capturadas por el equipo de comunicación de la ONG ecologista. Las tomas capturadas exhiben amplias zonas de espacios naturales hechas cenizas, y más fauna nativa y rural sin vida.
De acuerdo a la recopilación de datos actualizada por la organización al 28 de febrero pasado, antes de que se desataran incendios que consumieron hasta 8 mil hectáreas, entonces, 76 mil ya se habían perdido a causa del fuego en lo que va de 2023.
Las imágenes expuestas por la organización destaca el trabajo de los bomberos voluntarios que combaten las llamas todos los días. En una de ellas, un bombero explica que el fuego extingue toda posibilidad de vida en las áreas verdes, debido a que el calor se traslada por lo bajo, entre áreas secas, dificultando su visibilidad.
Por la misma razón, el registro impulsa una petición online rotulada "Basta de incendios y crisis ambiental. ¡Salvemos los Esteros del Iberá!".
El pedido advierte que "en estos momentos se están incendiando una vez más los esteros del Iberá", y recuerda que en "el año 2022 se quemaron más de un millón de hectáreas de este ecosistema, que sufrió uno de los más grandes incendios de los que se tenga registro en la zona".
"Cuando se producen estos incendios no sólo se quema la flora de los humedales sino también cientos de miles de animales. Se trata de un verdadero desastre ambiental", expone.
"Los esteros del Iberá son ecosistemas de vital importancia. Son fundamentales para la absorción del dióxido de carbono de la atmósfera y contribuir a frenar el avance del cambio climático", señala.
"Sin embargo, las sequías extremas, producto de la crisis climática, generan el ambiente perfecto para que ocurran incendios cada vez más frecuentes y más devastadores", insisten.
"Para dejar de agravar esta crisis debemos lograr que destruir bosques sea considerado un delito ambiental, alcanzar la deforestación cero, proteger los humedales y salvar el Mar Argentino de la amenaza petrolera".
Ante la consulta de por qué es tan importante proteger a los humedales del cambio climático, responden que son súper ecosistemas biológicos y se los considera parte fundamental de los sistemas naturales que hace posible la vida en nuestro planeta Tierra, ya que el 40% de todas las plantas y animales viven y se reproducen en ellos.
Ayudan a prevenir inundaciones porque amortiguan y absorben los impactos de las lluvias. Por lo tanto, contienen grandes reservas de agua dulce y ofrecen protección contra las sequías. También son grandes almacenadores de carbono, llegan a contener el doble que todos los bosques del mundo.
En los últimos 300 años se perdieron hasta el 87% de los humedales del mundo. En lo que respecta al territorio argentino, en 2022 se quemaron más de un millón de hectáreas de este ecosistema tan importante para nuestra supervivencia.