Dos jóvenes correntinos volverán a la escuela tras la intervención conciliatoria de un juez de Paz, informaron este lunes fuentes judiciales. 

El caso se dio en una institución del paraje Yahapé distante a 29 kilómetros de Berón de Astrada,  cuando el rector del establecimiento informó de la situación y el magistrado de esa localidad, doctor José Osvaldo Ledesma, intervino con una función conciliadora ya que era la única manera de que estos jóvenes tengan una posibilidad de forjar un futuro mejor.

Se trata de María y Juan, dos chicos de 15 y 16 años, que viven en un lugar alejado de la ciudad, en una zona rural, en situación de vulnerabilidad y colmados de privaciones que quizá le impidieron proyectar un futuro prometedor.

Es así que en mayo de este año dejaron la escuela, poniendo distintas excusas y sumaron 20 inasistencias,  pero el rector del colegio decidió no quedarse de brazos cruzados y se involucró para que estos niños puedan seguir estudiando y progresando. Son compañeros de curso y están en tercer año de la secundaria.

Si bien se trata de una situación administrativa que, en principio, no debe judicializarse, en el contexto la única intervención posible era la del Juzgado de Paz en función conciliadora y, además para arbitrar los medios para la intervención de los demás organismos.

En este marco se dio intervención a la Asesoría de Menores e Incapaces en turno y a la Disepa y se convocó a los padres de los adolescentes a una audiencia con el Rector, en la que participaron el juez, doctor José Osvaldo Ledesma y el secretario, señor Gabriel Romero como conciliadores.

Escuela y padres, un trabajo en conjunto

Los padres de los estudiantes asumieron el compromiso de la concurrencia de sus hijos a la escuela.

Y la Institución se ofreció a elaborar, con ayuda de la Disepa, una trayectoria especial  para que los estudiantes pudieran recuperar los aprendizajes y ponerse al día con los contenidos de las asignaturas.

En el ínterin, se ordenaron informes sociales en los domicilios de los jóvenes y se libraron otros oficios a organismos estatales encargados de velar por la protección de la infancia y la adolescencia.

Resultados positivos

Dos meses después se pidió nuevo informe de inasistencias al Colegio y se llevaron a cabo nuevas audiencias con los padres, para constatar el cumplimiento del compromiso, de todo lo cual surgió que los adolescentes solo habían tenido una falta en el mes de julio y otra en agosto; además, el plan de actualización se estaba implementando con éxito, se les entregó material de lectura y se realizó una planificación de clases específicamente para ellos.

Deserción escolar

Según un informe del Observatorio de Argentinos por la Educación solo el 13% de los estudiantes que comenzaron primer grado en 2011 llegaron al último año escolar en el tiempo esperado (2022) y con niveles satisfactorios de Lengua y Matemática.

Las cifras, posteriores a la pandemia, suponen un retroceso con respecto a los resultados de cohortes previas de alumnos, como las de 2005-2016 y 2009-2020.