Acusan de lavado de dinero a Jair Renan, hijo de Bolsonaro

Los ingresos de su empresa fueron inflados a R$ 4 millones

 

El Ministerio Público del Distrito Federal y Territorios (MPDFT) presentó cargos contra Jair Renan Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, por los delitos de lavado de dinero, falsedad ideológica y uso de documentos falsos en relación con la Operación Nexus de la Policía Civil.

Según las investigaciones, Jair Renan habría falsificado los resultados financieros de su empresa Bolsonaro Jr. Eventos e Mídia para obtener un préstamo del banco Santander, que no fue devuelto. Los detalles de los cargos penales se mantienen en secreto. Además, la institución financiera ha iniciado una acción legal para recuperar la deuda, obteniendo un fallo favorable para el pago de R$ 360 mil.

La presentación de los cargos fue divulgada por el diario O Globo y posteriormente confirmada por Agência Brasil. La acusación sostiene que los ingresos declarados por la empresa de Jair Renan fueron inflados hasta alcanzar los R$ 4 millones. El MPDFT, al ser contactado, informó que ha realizado su declaración en el caso y está a la espera de una decisión judicial que determine si los cargos son aceptados, lo cual daría inicio a un proceso penal.

En febrero, la policía presentó el informe final de la investigación, señalando tanto a Jair Renan como a su instructor de tiro, Maciel Alves, quien ahora también enfrenta cargos similares. En agosto del año pasado, la policía llevó a cabo órdenes de registro e incautación contra ambos.

El abogado Admar Gonzaga, representante legal de Jair Renan en este caso, criticó la filtración de los cargos a la prensa, argumentando que tales divulgaciones causan un strepitus fori, término que se refiere al bochorno generado por los procedimientos, lo cual puede tener efectos perjudiciales para la defensa, el debido proceso y la presunción de inocencia.

Por otro lado, Agência Brasil se puso en contacto con el abogado Pedrinho Villard, quien representa a Maciel Alves en este asunto. La defensa del instructor de tiro optó por no hacer comentarios sobre la formalización de los cargos.

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