Por falta de subsidios nacionales podrían activar despidos
Es porque las empresas deben hacer frente al pago con aumentos salariales otorgados el mes pasado en paritarias. La Unión Tranviaria Automotor (UTA) local está en estado de alerta.
El conflicto con la Unión Tranviaria Automotor se cerró con una liviana promesa de las autoridades de Transporte a los empresarios de que el presupuesto para pagar la paritaria iba a estar, pero por ahora no aparece. Las cámaras empresariales ya no mandarán más cartas documentos al ministro de Economía Luis Toto Caputo. “No tienen efecto”, reconocen.
Si los fondos no aparecen, las opciones que barajan las firmas son seguir reduciendo servicios o avanzar con despidos. “Puede ser afectar el servicio o echar gente. La verdad que cada empresa tendrá que tomar decisiones si esto sigue así”, confesaron.
En la ciudad de Corrientes hace meses atrás hubo suspensión de trabajadores y luego despidos debido justamente a que los números no les cerraban a las empresas de colectivos urbanos.
Incluso con la tarifa plana a $1.290 tampoco reditúa, es más, genera lo contrario ya que el uso del servicio sigue en baja debido justamente al costo del boleto.
El cálculo que hacen es que faltan un 30% de los recursos para cubrir el aumento de sueldos y de costos que desde junio no tiene actualización.
Durante el año la constante fue la tensión recurrente entre las empresas, los trabajadores y el Gobierno. Siempre hubo acuerdo al filo del límite. El 30 de octubre, hace un mes exacto, se había cerrado el último capítulo. Tras una reunión con autoridades de la Secretaría de Trabajo, la UTA llegó a un acuerdo salarial, anunció que levantó el paro de 24 horas previsto. Pero los $1.160.000 que deben cobrar de base los choferes en diciembre no están y tampoco lo necesario para el aguinaldo.
“Hay un juego de restricciones: No manejamos las tarifas, no manejamos los subsidios y cumplimos paritarias. La mitad del costo de una empresa es la mano de obra y además estamos obligados a brindar un servicio”, repite el presidente de la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), Luciano Fusaro.
En la Secretaría de Transporte aseguraron que no hay previstas reuniones, ni aumentos de subsidios, ni se analiza autorizar incremento de tarifas. En ese escenario las empresas deberán decidir cómo ajustarse a fin de año.
Están nucleadas en la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), la Cámara Empresaria del Autotransporte de Pasajeros (CEAP), la Cámara de Transporte de la Provincia de Buenos Aires (CTPBA) y la Cámara de Empresarios Unidos del Transporte Urbano de Pasajeros de Buenos Aires (CEUTUPBA). La semana próxima será determinante.