Aunque aún en la zona centro y sur de la provincia no registraron en lo que va de la semana – como sí sucedió sobre la costa del Uruguay – el déficit en el abastecimiento de este combustible, los productores arroceros se organizan por estos días para hacer “algo de acopio de combustible”, que les permita terminar de cosechar unas 10 mil hectáreas que restan todavía en los campos correntinos.

“Queda poca cosecha y estamos almacenando algo, para poder terminar la campaña”, confirmó Christian Jetter, referente de la Asociación Correntina de Plantadores de Arroz, en diálogo con Cadena de Radios.

“En arroz, se consume aproximadamente unos 25 mil litros de gasoil por hectárea en el momento de la cosecha. Es una importante cantidad la que hace falta, son casi 10 equipos”, señaló Jetter. “Por ahora no tenemos faltantes, esperemos no tenerlo durante la preparación de suelos y siembra, como sucedió en años anteriores que si bien no llegamos a quedarnos sin combustible, contamos con el suministro a cuentagotas”, remarcó el referente.

Lluvias que renuevan esperanza

En la zona centro y norte de la provincia se descargaron entre la noche del martes y la mañana de este miércoles unos 60 milímetros de agua. “La lluvia despierta la expectativa y los pronósticos son de continuidad durante la semana que viene”, anticipó Jetter. “De a poco, se va cortando el efecto de esta sequía tan importante que sufrimos durante el verano”, apuntó.

No obstante, lamentó que las precipitaciones llegaran “tarde para la campaña 2021 – 22, donde se estima que se perderá un 35% del potencial que tenía la provincia para esta cosecha cuando se sembró en septiembre. Sin embargo, permite acumular algo de agua para finalizar el riego sin bombeo donde hace falta”, sostuvo. “También es importante para empezar a juntar agua para el año que viene, y para la ganadería de la región que quedó tan sufrida”, indicó. “Después de estas lluvias, va a empezar a correr agua en todas las cuencas, a llenarse un poco los tajamares y arroyos, que podrán aportar a las represas”, evaluó el referente.

Pérdidas millonarias

A la hora de brindar un panorama de las pérdidas por la emergencia productiva a raíz de la sequía y los incendios, Jetter recordó que “el impacto más grande se da en un 20% del área de siembra, que se dejó de regar durante la compaña. Otro panorama, de un 50% de pérdidas en las chacras se registra donde se pudo regar de manera intermitente. Y las que lograron cosechar más temprano, tienen una pérdida de calidad importante, con arroces que maduraron en un periodo sumamente seco y con temperaturas por encima de los 40 grados. Eso presenta un mayor porcentaje de arroz quebrado”, explicó.

Aunque con pérdidas millonarias en el sector, Jetter sin embargo valoró el aporte de la provincia en materia de otorgamiento de créditos, en tanto recordó el compromiso del gobernador Gustavo Valdés para respaldar el pedido ante la Nación de la quita por un año de retenciones.