El intendente informó sobre la cantidad de evacuados y autoevacuados que hay en el lugar: "En estos momentos hay 30 familias evacuadas en el polideportivo y otras 3 en un SUM. Después hay otras 12 que están en casas de parientes. También hay algunas -aunque pocas- que hace varios días están con agua, pero no quieren irse, por temor a los hurtos". Buján destacó la importancia de la seguridad y salud de los afectados, reconociendo los desafíos que enfrentan al dejar sus hogares.

Ante esta situación, el Municipio desplegó esfuerzos para proporcionar ayuda a los afectados, con trabajadores municipales asegurando la provisión de alimentos y traslados para evitar mayores daños. "Empleados municipales elaboran las cuatro comidas diarias para quienes están evacuados y distribuyen kits de alimentos a los autoevacuados", señalaron.

El intendente destacó la colaboración recibida del gobernador Gustavo Valdés a través de Defensa Civil y Desarrollo Social, subrayando la importancia de mantener el apoyo en medio de la emergencia. Sin embargo, la incertidumbre persiste debido a la inestabilidad climática. "El lunes empezó a llover otra vez y todo se volvió a complicar", lamentó Buján, señalando que los barrios cercanos a la ribera, como Virgen del Rosario y Cruz de los Milagros, son los más afectados hasta el momento.

Están impulsando la reanudación del dragado del Riachuelo como medida preventiva. "Una obra que implicará recursos que el Municipio no está en condiciones de afrontar, pero que aseguran es la única opción viable", concluyó el intendente, destacando la urgencia de esta acción para mitigar los daños y proteger a la población.

R: Ivroud Lucas.-